Y se hizo de nuevo la magia…

Prometimos volver y cumplimos nuestro compromiso de llevar la magia de la Navidad a los mayores de la residencia Ballesol. Nuestros pequeños magos encendieron de nuevo sonrisas en los rostros de abuelitos y abuelitas asomados a los balcones, de sanitarios, del resto del personal de la residencia.

Las profesoras nos sentimos muy orgullosas de nuestros niños; tuvimos la sensación de que algo bueno estábamos dejando en ellos, principal propósito de nuestro quehacer diario. Habíamos ensayado con mucha dedicación para que todo saliera bien. Y no nos defraudaron. Al contrario, nuestros alumnos honraron el nombre del colegio con su impecable actuación. Se mostraron ilusionados, entregados, felices… y nos contagiaron a todos la alegría de sus canciones y bailes.

Nuestro más sincero agradecimiento a la residencia Ballesol por su calurosa acogida y, por supuesto, gracias también a nuestros alumnos por su sensibilidad, empatía y entusiasmo infinitos. Fue un verdadero placer traspasar con ellos la frontera de las aulas para hacer llegar el espíritu navideño a nuestros mayores.

¡Hasta siempre!

Angela Heidbrink, Mariella Wassermann y Marga Hernani